Jabón líquido casero

 

El otro día como todos los veranos, preparé mi jabón líquido casero. Subí el video a Instagram, y varios de vosotros me habéis preguntado por la receta, pues aquí la tenéis.
Os comentaba en instragram, que seguro os preguntareis si realmente merece la pena hacer este jabón, con la variedad que tenemos en el mercado. Os cuento.
No recuerdo un verano sin hacer el jabón junto a mi madre, éste y el de pastillas. Mi abuela se lo enseño a mi madre y yo espero hacerlo con mis hijas o cualquier persona que lo disfrute como yo. Ese recuerdo maravilloso, me acompaña siempre, como tantos otros y me encanta recordarlo haciendo mi propio jabón.
A parte de esto, es un jabón estupendo, con mucha espuma y denso. Elimina la grasa de maravilla. Yo lo utilizo para limpiar todo lo que no meto en el lavaplatos, para los paños de cocina, las bayetas, los suelos , limpiar en casa… quedan estupendos.

Puede utilizarse también como detergente de lavadora, pero es cierto, que dependiendo del uso que haya tenido el aceite, puede dejar un olor no muy agradable en la ropa. Tendríamos que añadir mas suavizante de lo habitual.
Tenéis que probarlo. Es tan fácil y no necesitas nada especial para hacerlo, ya que todo el proceso se realiza dentro de una garrafa. Eso si, muchísimo cuidado con la sosa caústica, es abrasiva y una sola gota en contacto con la piel quema. Lo solucionamos utilizando guantes de cocina y no viene nada mal utilizar unas gafas de las que usamos para hacer bricolaje y que no te costarán caras.
Al final os dejo las ventajas e inconvenientes que desde mi punto de vista tiene el jabón.
MUY IMPORTANTE.- Antes de empezar, lee toda la receta. Si tienes alguna duda, pregúntame y te responderé encantada.
Empezamos,

INGREDIENTES

• 3 litros de agua a temperatura ambiente (del grifo)
• 500 gr de jabón líquido fregaplatos
• 500 gr de aceite usado y colado
• 125 gr de sosa caustica
• Una garrafa de plástico duro, vacía de agua con capacidad superior a 6 litros
• Un embudo (no es necesario, pero te facilitará el trabajo)
• Envases de cristal o de plástico para volcar el jabón una vez que esté hecho.

Día 1. Preparamos los ingredientes, los pesamos. Es recomendable que prepares el jabón en un sitio ventilado o con la venta abierta. No te olvides de ponerte los guantes y las gafas, no queremos quemaduras innecesarias. Añadimos el agua en la garrafa y con un embudo y con mucho cuidado dejamos caer la sosa caústica. Cerramos la garrafa perfectamente y agitamos durante 10 segundos. Dejamos unos 5 minutos, para que la sosa se disuelva. Si tocas la garrafa verás que la temperatura del su interior aumenta. Comprueba que está disuelto en la base de la garrafa. Si no fuera así agita nuevamente y espera. No te preocupes si queda alguna perlita de sosa sin disolver, desaparecerán. Con cuidado abre la garrafa. En este momento procura no tener la cara cerca de la entrada de la garrafa. Ponemos el embudo y añadimos el aceite, después el jabón líquido. Cerramos muy bien la garrafa y agitamos de lado a lado unos 15 segundos. Dejaremos la garrafa hasta el día siguiente. Los ingredientes se mezclan, pero si te das cuenta vuelven a separarse. Es normal. Día 2. Agitamos la garrafa otros 15 segundos. Día ·3. Volvemos a agitar la garrafa 15 segundos. Agitaremos la garrafa 15 segundos al día hasta un total de 7 días. Con una vez al día basta. Verás que según van pasando los días el jabón va mezclándose y espesando. Cada día te costará mas agitarlo. Mas o menos desde el 4-5 día, verás que el color del jabón es uno solo y se ha mezclado completamente. Si ves que no esta mezclado, déjalo un día mas. En este momento lo paso a los botes, para manejarlo con mas facilidad y antes de que se quede mas compacto. Lo guardo y lo utilizo cuando han pasado 10 días. Listo.

 

 

NOTAS

– El agua del grifo(ni fría ni caliente).El detergente el que prefieras, o para lavar platos o para lavadora. El aceite puede ser de oliva, de girasol… Es fundamental colarlo para eliminar restos de comida.
– Puedes añadirle suavizante, pero lo haremos al tercer o cuarto día.
– Os aconsejo que utilicéis una garrafa con un plástico duro. Yo tengo una de la marca Regas, que está fenomenal porque cumple con esta función. La garrafa la podremos utilizar para hacer el jabón mas veces. No hay que tirarla.
– La sosa caústica la puedes comprar en droguerías. Yo la compro en Mercadona, viene en perlitas diminutas y se disuelven muy bien en el agua.
– Te aconsejo que los envases para guardarlo, sean de boca ancha, para que puedas sacarlo mas fácilmente.
– La primera vez que hacemos el jabón necesitamos comprar el jabón líquido. Para las siguientes veces que lo hagamos, utilizaremos 500 gr de nuestro jabón que habremos reservado.

 

VENTAJAS

– Estamos reciclando el aceite que de otra forma no daríamos uso.
– Optimizamos el precio del aceite de oliva, ya que lo usamos por partida doble. Para freir y para hacer jabón.
– La primera vez que hagamos el jabón, obtendremos 4,125 Kg de jabón por aproximadamente 1€. La segunda vez, utilizando como base nuestro jabón, nos costará 0,36€.

INCONVENIENTES

– Tenemos que tener cuidado con la sosa caústica, como os he dicho antes es abrasiva. Si tenéis niños en casa, lo haremos siempre alejado de ellos y cuidaremos de guardar la garrafa de un día para otro y que no esté al alcance de ellos.
– El jabón cuando hace calor está gelatinoso y líquido, pero si la temperatura es baja o lo hacemos en invierno se quedará compacto. Simplemente tendremos que ponerlo en un sitio para que le dé el sol o calentarlo ligeramente en el microondas, al baño María,con el calor residual del horno.

 

Espero que ésta información os sirva para prepara vuestro propio jabón. ¡Ah! se me olvidaba, como alguno de vosotros me habéis pedido, en un próximo post os contaré como se hace el jabón en pastilla.

Olga