Galletas de mantequilla, chocolate y nueces

Empezamos la semana con unas galletas de mantequilla y chocolate, un clásico que siempre gusta.

No son unas galletas para comer todos los días, pero si tu hija te las pide insistentemente, como es mi caso, mejor hacerlas en casa, porque serán infinitamente mejores a cualquiera de las que podamos comprar en el súper.

Son muy agradecidas, están buenísimas, son rápidas, es mezclar y listo. Puedes añadir distintos chocolates o utilizar el que mas te guste. 

Si consigues que quede alguna, puedes conservarlas en una lata o en un bote de cristal. ¿Te animas?

Empezamos,

INGREDIENTES (para unas 16 galletas)

• 150 gr de azúcar (yo uso azúcar moreno)
• 100 gr de mantequilla a temperatura ambiente
• 1 huevo
• 1 cucharadita de vainilla
• 250 gr harina de trigo
• 1 pellizco de sal
• 1/2 cucharadita de bicarbonato
• 150 gr de chocolate troceado o pepitas
• 1 puñado de nueces picadas

Empezaremos mezclando la mantequilla con el azúcar hasta integrar. Puedes utilizar varillas manuales, eléctricas, un tenedor y si usas la Kitchenaid amasa en velocidad baja con la pala K.

Una vez que esté bien integrado, añade el huevo, la vainilla y mezcla nuevamente.

Vamos a añadir la mitad de la harina tamizada, el bicarbonato y la sal.

Cuando esté bien mezclado, añadimos el resto de la harina junto a el chocolate (reserva unos trocitos para poner encima de las galletas) y las nueces picadas. Mezclar bien.

Dejaremos como unos 15 minutos en la nevera. Si vemos que la masa está muy blandita las dejaremos más tiempo.

Precalentamos el horno a 180°, con calor arriba y abajo.

Forramos una bandeja de horno con papel de horno.

Cogemos una cucharilla de postre bien llena y damos forma de bola, si quieres hacerlas más grandes, pon más cantidad.

Deja distancia entre unas y otras y pon unos trocitos de chocolate encima de las galletas, presionando ligeramente para que se fijen. Para esta cantidad tendrás que hornear primero una tanda y luego otra.

Llevaremos al horno durante 10 a 15 minutos en función de como te gusten.

Si quieres que te queden blanditas, en cuanto veas que el borde de la galleta, empieza a dorarse ligeramente, retíralas del horno. Al enfriar endurecerán.

Si las quieres más duras, tendrás que esperar a que estén más tostadas.

Listas.