Esta receta lleva los ingredientes perfectos para que consigamos unas magdalenas saludables, con un sabor intenso a chocolate, jugosas y con un sabor absolutamente increíble.
Vamos a endulzarlas con dátil, te vendrá estupenda si no consumes gluten y si tienes algún tipo de intolerancia a la leche o sus derivados, tienes que probarlas, porque no lleva lácteos.
He de contaros, que desde la primera vez que las hice, he repetido la receta varias veces, porque os aseguro que un bocado es absoluta Gloria.
No es una magdalena dulzona en exceso, en casa nos gustan así, si te gusta más dulce puedes añadir 20 gr más de dátil.
No prescindas de la vainilla, porque junto a la naranja le da un toque increíble.
El tema del gasificante que tanto me preguntáis. En este caso que utilizamos harina de avena y dátil, que hace más densa la masa, me gusta utilizar gasificante porque hace que quede con más aire, más esponjosa.
El gasificante está compuesto por dos sobres, uno contiene acido cítrico y el otro bicarbonato sódico. Os dejo el enlace de Gaseosas el tigre, uno de los que se comercializa en España.
En caso de no tenerlo o encontrarlo, puedes sustituirlo por bicarbonato de sodio o ½ cucharadita de bicarbonato y ½ cucharadita de levadura de repostería.
Siempre os digo que lo mejor es dejarlo reposar toda la noche y disfrutarlo al día siguiente, os aseguro que estas magdalenas mejoran con los días.
Si las preparas con temperaturas suaves, te recomiendo que una vez frías, las guardes en el frigorífico. No sería necesario guardarlas en frío si las consumimos al día siguiente.
Una receta para endulzarnos de forma saludable que no te puedes perder.
Empezamos,
INGREDIENTES (9 unidades)
- 160 gr de dátiles sin hueso (he usado medjoul)
- 2 huevos
- 100 gr de remolacha cocida, asada o de la que viene cocida y envasada
- 1 naranja de zumo entera (la mía pesaba 230 gr)
- 50 gr de aceite de oliva
- 70 gr de cacao en polvo sin azúcar (he utilizado al 70%)
- 80 gr de harina de avena
- 1 sobre de gasificante o ½ cucharadita de bicarbonato y ½ cucharadita de levadura de repostería o ½ sobre de levadura de repostería
- Un buen pellizco de sal
- 2 puñados de chips de chocolate
- vainilla (yo he añadido 2 cucharaditas de líquida), pero puedes usar en pasta, en vaina)
La remolacha la asaremos en el horno a 180°, hasta que al pincharla esté blandita. Para cocerla cúbrela con agua y déjala hervir hasta que esté hecha. He probado con la que viene cocida y envasada y también queda estupenda.
La naranja la lavaremos a conciencia, porque la vamos a triturar entera con su cáscara.
Vamos a triturar los dátiles, los huevos, la remolacha, la naranja entera y troceada , la vainilla y el aceite de oliva, hasta convertirlo en una pasta. Es importante que quede bien triturada.
Añadimos el cacao en polvo, la harina de avena y el gasificante o levadura de repostería y la sal.
Mezclamos completamente. Verás que es una masa muy espesa.
Añadimos los trocitos de chocolate y terminamos de mezclar completamente.
Utilizo una bandeja metálica de magdalenas. Engrasa ligeramente las paredes de cada hueco y espolvorea con harina. Pon el molde boca abajo y con un golpe seco en la base elimina los restos de harina. Llenamos cada hueco completamente de masa.
Meteremos al horno la bandeja y hornearemos durante 5 minutos a 200° y 20 a 25 minutos más a 180° o hasta que al pinchar la magdalenas veas que el palo sale limpio. A los 10 minutos desmoldamos y ya las tenemos.
Hasta la próxima receta.
Bea Beita
Espero q estén tan ricas como huelen!!! Aún tenemos q esperar un poquito para poder probarlas.
Gracias por la receta.
Olga
Eso espero, que os hayan gustado. Un abrazo.